Presenta antecedentes históricos y estadísticos que describen la precaria situación de vida del sector de minifundio, de la sociedad nacional. Describe aspectos de las organizaciones del sector campesino, informando acerca de las políticas e instituciones públicas de apoyo al campesino, en los planos de la generación tecnológica, de la asistencia técnica y extensión del crédito, de la distribución de la tierra y otras políticas destinadas a mejorar sus sistemas de producción y nivel de vida. Analiza las estrategias utilizadas para favorecer a este sector, las que, según se señala, no siempre han sido consistentes y continuadas. Finalmente, ofrece una serie de conclusiones y recomendaciones para avanzar en la solución del enorme espectro de problemas vigentes. Todas ellas pueden servir de base para el planteamiento de nuevas políticas y estrategias destinadas a favorecer un desarrollo con equidad.
