Por iniciativa de la Fundación Alemana para el Desarrollo Internacional (DSE), se invitó a organizaciones e instituciones públicas y privadas, que trabajan en proyectos y programas para el desarrollo integral de sectores pobres de la población, a participar en un Seminario- Taller en dicimbre de 1999, en San Salvador, a afecto de analizar las acciones políticas y sociales en beneficio de esos sectores, dentro de un marco de seguridad social.

La presente década avanza y todos en Guatemala: gobernantes y gobernados, ricos y pobres, urbanos y rurales, indígenas y no indígenas, integrados y marginados, están sumidos en un proceso confuso de la búsqueda del bienestar, el progreso personal y colectivo, la seguridad, la armonía social y la paz en justicia y libertad. Dentro de este entorno, es notoria la necesidad de contribuir a esa clarificación y orientación del incipiente y aún distorsionado proceso de desarrollo nacional, en un camino de paz y convergencia de los intereses sociales. Esto es lo que se persigue con el artículo de este MOMENTO: contribuir a esa clarificación y orientación, procurando rescatar los valores tales como el respeto a la dignidad de la persona y objetivos como el trabajo comunitario, el núcleo familiar y el propio ser humano como sujeto protagonista de su propio futuro.

En la primera parte se abordan los aspectos conceptuales que sirven de fundamento a la seguridad social y se presentan las acciones concretas, consideradas imprescindibles, para impulsar una política nacional en materia de seguridad social y salud integral y sobre las cuales prácticamente hay consenso entre los diferentes actores sociales.

La información estadística contenida pone de manifiesto en Guatemala el enorme déficit de cobertura. Después de más de 55 años de existencia del IGSS, el porcentaje de la población economicamente activa -PEA- atendida por el Instituto es de menos del 25 por ciento con una tendencia a disminuir en términos relativos y con un crecimiento casi insignificante en términos absolutos. Otros datos que presenta el estudio revelan las dificultades crecientes del IGSS derivados del incremento constante de los costos de la atención, en los programas de enfermedad, maternidad y accidente, así como en los montos de las prestaciones pagadas por el programa de invalidez, vejez y sobrevivencia -IVS-. A esto se agregan los adeudos acumulados por la falta de pago de las contribuciones, especialmente las que corresponden al Estado en su calidad de empleador y como Estado propiamente dicho -Artículo 100 de la Constitución Política de la República